¿UNA CARRETERA HACIA EL EVEREST?

Pues sí y no. A primeros de agosto, en el post VIVIR ANDANDO, os explicaba que en la parte baja de los valles del Solukhumbu están construyendo una carretera que tarde o temprano parece que llegará hasta Lukla. Pues bien, un mes y medio después parece que será más pronto que tarde.

Lukla es donde empiezan los trekkings de esta zona y, salvo que se suba andando desde más abajo, a este pueblo sólo se llega con los pequeños aviones que pueden aterrizar en el pequeño y peligroso aeropuerto Tenzing-Hillary.

Trazado esquemático de la nueva carretera que unirá Phaplu con Chaurikharka (Lukla) 

A menudo los aviones no pueden entrar o salir de Lukla por culpa de las condiciones climatológicas y esto supone un gran inconveniente tanto para la gente local como por los turistas. Sin ir más lejos, la semana pasada estuvieron cinco días seguidos sin llegar ni salir aviones, con más de 300 personas bloqueadas en Lukla que, por ser aún temporada baja, es mucha gente. Y una cantidad similar debían esperarse a Kathmandu para subir hacia aquí.

No sólo los aviones no podían volar, sino que tampoco los helicópteros. Un día, algunos lo intentaron y, de 12 que fueron autorizados a salir de Lukla, 10 tuvieron que hacer aterrizajes de emergencia antes de llegar a Katmandú. Los periódicos y las redes sociales se hicieron mucho eco de ello       

 No es la primera vez que pasa. en noviembre de 2011, más de 3.000 turistas quedaron varados en Lukla después de que las condiciones meteorológicas adversas detuvieran los vuelos desde Katmandú durante seis días consecutivos. Es un problema recurrente cada año.

Esto fue el detonante, supongo, que impulsó a las autoridades del municipio del Khumbu a explicar la reanudación del proyecto de alargar la carretera que desde Phaplu ya alcanza Kharikhola, el pueblo donde comienza la región del Khumbu. Este proyecto data de hace años, pero debido a los dos terremotos de 2015, quedó parado.

Los trabajos de apertura de la carretera desde Kharikhola (2.100 m) hasta Chaurikharka (2.700 m), a unos tres kilómetros del aeropuerto de Tenzing-Hillary, ya han comenzado y esperan que estén finalizados en julio del año próximo. El asfaltado tendrá que esperar todavía, aunque algunas voces dicen que podría estar terminado en 2021.

La carretera se detendrá a Chaurikharka y no irá más arriba pues ya entraría dentro del Parque Nacional de Sagarmatha. Además, está previsto que en este último tramo de carretera sólo circulen vehículos eléctricos.       

Pero este proyecto plantea una gran incógnita. ¿Qué incremento tendrá el turismo de montaña en la zona como consecuencia de esta mejora? Esto preocupa a mucha gente de la zona pues actualmente ya hay puntas de afluencia de gente en plena temporada que agotan la capacidad de alojamiento. Pero no es sólo el alojamiento lo que preocupa. Es el suministro de alimentos, la atención sanitaria, el impacto medioambiental, los servicios básicos como el agua o la electricidad. Todo ello, aquí requiere de mucho más tiempo para adaptarlo a una demanda mayor.

Si ahora, con 65.000 visitantes al año, el Khumbu ya está al límite, ¿qué puede pasar si llegan muchos más a corto plazo? Pues que pueden morir de éxito.